
HERRAMIENTRAS PARA UN DIAGNÓSTICO DERMATOLÓGICO: ¡TODO LO QUE NECESITAS SABER!
En principio, valdría la pena aclarar que la dermatología ha sido una especialidad médica que basa su diagnóstico en la observación clínica. En los últimos años esta tendencia ha ido cambiando gracias a la introducción de equipos tecnológicos que ayudan a complementar el ojo desnudo del especialista.
De amplio uso es la dermatoscopía, que ha demostrado su utilidad en el diagnóstico de melanoma y otras neoplasias cutáneas. Además de este práctico instrumento, que se usa en forma individual en la consulta, existen otros equipos que permiten realizar imágenes de lesiones sospechosas y con ello dar mayor información en el proceso diagnóstico. En MeSurgical, mediante el presente artículo, analizaremos la revisión de cuatro técnicas e instrumentos con los que tú, como profesional, podrás contar hoy en día en tu práctica médica.
Fototerapia: La fototerapia o terapia lumínica es una clásica herramienta utilizada en dermatología para diversas patologías inflamatorias y autoinmunes. En las culturas primigenias se utilizaba la luz solar como tratamiento de enfermedades de la piel, simulando lo que hoy se conoce como PUVA terapia.
Hoy en día se utiliza la luz ultra violeta (UV) de dos formas, según su longitud de onda; a su vez puede usarse combinada con psoralenos como fotosensibilizantes, y UVB puede utilizarse como banda angosta, manteniendo su eficacia y aumentando su seguridad.
Láser: El uso de láser en dermatología está ampliamente reconocido y documentado, siendo una importante herramienta terapéutica en distintas condiciones y patologías cutáneas. El láser o luz amplificada mediante emisión estimulada de radiación, es una fuente de luz en la que la energía radiante se encuentra en forma de fotones que son capaces de producir efectos biológicos al incidir sobre una molécula excitada. Los equipos de láser pueden generar radiación en distintas longitudes de onda, como la luz visible o la infrarroja.
Videomicroscopía: La dermatoscopía y seguimiento dermatoscópico digital mediante videomicroscopía permiten observar características propias que no son posibles de detectar en el examen con ojo desnudo, permitiendo elevar el umbral de sospecha en lesiones malignas.
Microscopía confocal: La microscopía confocal es una herramienta de imágenes que permite la visualización de células y estructuras de la piel de forma no invasiva y en tiempo real. Gracias a que la melanina y melanosomas son estructuras de alto contraste en la microscopía confocal, esta técnica puede ser usada para estudiar la morfología de tejidos en piel normal y en lesiones melanocíticas.
En conclusión, hemos mencionado en MeSurgical la importancia de contar con buenos equipos diagnósticos y terapéuticos ¿Por qué? Precisamente porque estos ofrecen mayor seguridad y confianza tanto a médicos como pacientes, permitiendo practicar una dermatología integral, amplia y resolutiva.